¿Deseas comprar una banqueta y no terminas de decidirte por el tipo más adecuado? En Aosom.es hemos hecho esta guía de compra, precisamente, para ayudarte en tu elección. Con ella, queremos proporcionarte toda la información que necesitas para que elijas la idónea para ti.
Lo que necesitas saber antes de comprar una banqueta
Antes que nada, es importante que conozcas los tipos de banquetas que te ofrece el mercado y qué uso le vas a dar. De esta forma, directamente descartarás los de un tipo y seleccionarás los de otro. Te mostramos algunos de ellos.
Banqueta básica
Es ideal para colocarla en la entrada, en el salón o en el dormitorio.
Dispones de muchos estilos y se adapta perfectamente a la decoración general.
Es muy práctica, pues te permite calzarte o descalzarte con comodidad y apenas ocupa espacio. Además, dispones de un asiento extra para tus invitados.
La estructura suele ser robusta y estable. Por su parte, los tapizados son de alta calidad, muy resistentes al desgaste.
Banqueta pie de cama con almacenaje
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Es tan versátil que cumple perfectamente su función en los pies de la cama, en el recibidor e, incluso, como mesa auxiliar en el salón.
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Dispone de espacio de almacenamiento que siempre viene bien para contribuir al orden de la estancia.
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Los asientos suelen estar acolchados, lo que hacen que sean muy cómodos.
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Las patas suelen ser de madera maciza o de acero para proporcionar la máxima estabilidad y resistencia.
Otomana puff
Es uno de los muebles auxiliares más versátiles que hay, pues te quedarán perfectos como asiento o como mesa.
Tiene tal personalidad que proporciona un toque elegante y clásico a la estancia donde la pongas.
Muchas de ellas disponen de espacio de almacenamiento muy amplio.
Los tapizados siempre son acolchados y confortables. Es frecuente encontrarlos en estilo capitoné con botones, lo que les proporciona una superficie estable.
Banqueta de estudio
Es imprescindible si tienes hijos que aprenden piano en casa, aunque la puedes utilizar también para que lleguen con comodidad a la mesa del comedor.
Son banquetas que puedes regular en altura para adaptarlas a su tamaño.
Muchas cuentan con espacio de almacenaje para las partituras o lo que desees.
Suelen estar tapizadas sobre espuma de alta densidad para proporcionar la máxima comodidad.
El modelo que mejor se adapta a tus necesidades
Una vez que conoces todos los tipos existentes, es el momento de que establezcas tus criterios de compra. Estos son muy personales y se deben adecuar a tus gustos y necesidades. Te mostramos tres ejemplos.
La banqueta con mejor calidad-precio
HOMCOM Banqueta pie de cama tapizado en terciopelo
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Gracias a la curvatura de sus brazos, esta banqueta proporciona un estilo muy elegante a tu dormitorio, a la entrada o al salón.
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Bajo la tapa de su asiento, esconde un amplio espacio de almacenamiento muy práctico.
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Cuenta con un asiento acolchado muy cómodo, con tacto aterciopelado, para descalzarte.
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Las patas son de madera de caucho maciza para proporcionarte la máxima estabilidad y resistencia.
La banqueta más vendida
HOMCOM Banqueta con brazos tapizada en negro
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Es una banqueta muy versátil que quedará bien en el recibidor, el salón o como pie de cama en el dormitorio.
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Está tapizada de un textil no tejido de lino, muy suave sobre espuma de alta densidad, muy cómoda.
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Las patas son de madera maciza de caucho, con almohadillas ajustables para adaptarse a las irregularidades del suelo.
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Dará un aire elegante y funcional a cualquier espacio donde la pongas y es un recurso decorativo atemporal.
La banqueta más económica
HOMCOM Otomana reposapiés en gris claro
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La parte del asiento, tapizada en capitoné, le proporciona un estilo vintage.
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Dispone de cuatro patas cortas de madera maciza de caucho que garantizan su resistencia y estabilidad.
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Está tapizada en tela de poliéster transpirable y es agradable al tacto, que imita al lino.
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Es muy versátil, ya que la puedes usar como taburete, reposapiés o mesa auxiliar.
¿Por qué comprar una banqueta?
Son muchos los beneficios que te proporciona comprar una banqueta para cualquier espacio de casa. Te mencionamos algunos aquí:
Es un elemento estilístico que te ayuda a proporcionar un toque elegante en cualquier estancia.
Puedes aprovecharte del espacio para almacenamiento del que disponen algunos modelos.
Contribuye a rematar la decoración de una entrada sin invertir una gran cantidad de dinero.
Dispones de un asiento extra por si en algún momento lo necesitas.
Te proporciona comodidad, ya que son excelentes como reposapiés.
FAQ
Dispones de muchos modelos que son, asimismo, pequeños. Sin embargo, lo más aconsejable en tu caso es que sea una banqueta con almacenamiento, puesto que la ausencia de espacio para guardar cosas suele ser un problema.
Las otomanas siempre se han utilizado como mesas auxiliares o de centro en los salones. En cuanto a las banquetas, depende del diseño. Hay muchas sin brazos que quedarían perfectas también.
Es perfecto. Suelen tener mucha superficie de apoyo, con lo que son muy estables y, muchos modelos disponen de espacio de almacenamiento que puedes emplearlo para guardar juguetes.
La versatilidad es la maravilla de este mueble. Puedes utilizarlo como te convenga.
Mantenimiento de una banqueta
Si deseas que tu banqueta te dure mucho tiempo, lo mejor es que prestes atención a algunas tareas de mantenimiento periódicas que le tendrás que realizar. Te proporcionamos algunos consejos:
Comprueba que los tornillos que pudiera llevar siguen bien ajustados. Si no es así, apriétalos sin deformarlos.
Fíjate en que las patas, si las lleva, reposan correctamente en el suelo. En caso contrario, debes arreglarlas.
Si se ha mojado el tapizado, asegúrate de que se seca correctamente. Si es necesario, saca la banqueta fuera para que seque antes.
Examina que las almohadillas de las patas están en perfecto estado para cumplir su función protectora.
Repasa el estado de las patas si son de madera. En ocasiones, dependiendo del clima de donde vivamos, es conveniente aplicarles algunos tratamientos cada cierto tiempo.
Si tu banqueta dispone de espacio de almacenamiento, sigue las instrucciones del fabricante en cuanto al peso máximo que puede soportar y no la intentes mover cuando esté cargada.