:¿Te has decidido por comprar un gallinero de acero, pero no tienes claro qué modelo es el mejor para ti? En Aosom.es hemos elaborado esta guía de compra con el objetivo de proporcionarte toda la información que necesitas para que tu compra sea plenamente satisfactoria.
Lo que necesitas saber antes de comprar un gallinero de acero
Antes de decantarte por un modelo u otro, es imprescindible que tengas en cuenta las diferentes características que poseen los distintos tipos de gallinero de metal que hay en el mercado. Para eso, hemos seleccionado algunos de los aspectos más importantes que debes valorar.
Los paneles de un corral para gallinas para exteriores suelen estar hechos de metal tratado para soportar bien a la intemperie. En este sentido, uno de los mejores materiales es el acero galvanizado. Por otro lado, es frecuente que tengan alguna parte cubierta para proporcionar sombra a los animales y resguardarlos de la lluvia. Para conseguirlo, los fabricantes recurren a la tela Oxford de poliéster o a algún polímero como el PE.
Los vas a encontrar de diferentes tamaños. Los más pequeños tienen una capacidad máxima de 8 gallinas. En cambio, en un gallinero grande puedes introducir hasta 30 ejemplares, según la raza que escojas.
Este tipo de gallineros puede llevar nido al que puedes acceder desde el exterior. De esta manera, te resultará sencilla y rápida la recolección de huevos cada mañana sin necesidad de introducirte en el corral.
Por otra parte, la mayoría de modelos disponen de una o varias puertas con cierres de seguridad. Además, suelen incluir las estacas o las fijaciones para que la estructura quede estable al suelo.
Puedes usar este tipo de cercado de acero para gallinas para criar cualquier tipo de animal de granja. Solo has de tener en cuenta sus dimensiones y el número de ejemplares que deseas tener para proporcionarles el máximo bienestar.
El modelo que mejor se adapta a tus necesidades
Una vez que conoces las características principales de un gallinero de acero, es el momento de que reflexiones sobre esas prioridades de compra que cubren perfectamente tus necesidades. En este apartado, te proponemos tres ejemplos.
El gallinero de acero con mejor relación calidad-precio
PawHut Gallinero grande con techo de PE
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Este cercado de acero para gallinas tiene una capacidad de 8 a 12 ejemplares.
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Dispone de una gran amplitud para que los animales estén en condiciones de semilibertad, pero protegidos de los depredadores.
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Cuenta con una puerta con cierre de seguridad para proporcionar una mayor protección.
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Tiene una cubierta parcial impermeable elaborada con tejido Oxford que ofrece una buena protección contra los rayos ultravioleta.
El gallinero de acero más vendido
PawHut Gallinero de metal con cierre de seguridad
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Su diseño ofrece una gran versatilidad, ya que también puedes introducir conejos, pollos, patos y otros animales pequeños.
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Cuenta con una parte techada con tela Oxford de gran calidad, muy resistente a la intemperie, a la lluvia y a los rayos solares.
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La puerta dispone de cierre de seguridad para evitar que los animales se escapen.
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Está realizado en metal galvanizado con una buena resistencia a la oxidación.
El gallinero de acero más económico
PawHut Corral de gallinas de dos dimensiones con acero galvanizado
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Es un modelo en el que puedes elegir dos largos distintos, o bien de 2 metros o de 3,02 metros.
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Cuenta con una parte techada cubierta con tela Oxford impermeable y tratada para tener un buen comportamiento a la exposición solar.
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Dispone de una puerta con cierre de seguridad muy cómoda.
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Este gallinero de exterior es muy versátil, por lo que puedes utilizarlo para distintos tipos de animales.
¿Por qué comprar un gallinero de acero?
Son muchas las razones que hay para que te decidas por comprar un gallinero de metal. Te mencionamos algunas de ellas:
Es muy resistente y duradero, lo que significa que te puede durar muchos años con un mantenimiento adecuado.
Está diseñado para resistir a la intemperie y proteger a los animales ante la lluvia, el sol, el viento y la nieve.
Es muy fácil de limpiar y mantener, lo que facilita el cuidado de las gallinas y crear un ambiente saludable para ellas.
Proporciona una protección efectiva contra los depredadores.
Lo puedes personalizar para adaptarlo a tus necesidades específicas, incluyendo el tamaño, la forma y los accesorios, como comederos y bebederos.
Se trata de una inversión inteligente si deseas criar gallinas para la producción de huevos.
Es muy versátil, ya que te sirve para proteger a cualquier mascota o para criar animales de granja.
FAQ
Depende de sus dimensiones. En general, se aconseja que cada gallina disponga de un metro cuadrado para garantizar su bienestar y evitar posibles peleas entre ellas.
Sí. El metal es un material resistente y duradero que proporciona una protección eficaz contra los depredadores y los fenómenos atmosféricos. Sin embargo, es importante que el metal utilizado sea de alta calidad y esté diseñado específicamente para su uso en gallineros.
Depende de las necesidades específicas de tus gallinas, de tu situación geográfica y de cómo desees criarlas. Los accesorios más básicos son los comederos, los bebederos, las perchas para su descanso, el nido y el material para anidar. Sin embargo, si hace mucho frío en invierno, tal vez te convenga meter un gallinero de madera dentro y darles calor.
Depende del tratamiento que haya recibido el metal. Si es acero galvanizado, lo puedes hacer con agua y jabón neutro con facilidad.
Mantenimiento de un gallinero de acero
Para que tu corral para gallinas te dure mucho tiempo en perfectas condiciones, conviene que prestes atención a las siguientes tareas de mantenimiento:
Asegúrate de que el metal no tiene bordes afilados o partes salientes que puedan ocasionar heridas a las gallinas.
Recorre el perímetro exterior del cercado para cerciorarte de que ningún depredador ha cavado a su alrededor.
Comprueba que el cierre de seguridad funciona de la forma adecuada.
Revisa el estado de las bisagras de la puerta.
Examina el techado de lona de tu gallinero de acero para verificar que sigue fijado correctamente y que no está deteriorado. Para eso, tras la lluvia, el suelo de debajo debe continuar seco.
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