¿Estás buscando toldos laterales y verticales, pero no tienes claro cuáles elegir? Con esta guía de compra de Aosom.es queremos ayudarte. Te damos la posibilidad de conocer la información más relevante de estos productos para que compres los adecuados.
Lo que necesitas saber antes de comprar toldos laterales y verticales
Para empezar, es importante que conozcas las distintas posibilidades que tenemos en el catálogo. Así, podrás seleccionar unas y descartar otras. Te hablamos de algunas de ellas.
Toldos laterales
Son una excelente opción para proporcionar sombra, privacidad y protección contra el viento en espacios al aire libre.
Se extienden horizontalmente desde un punto fijo, que puede estar en una pared, en un muro o en el suelo. Así, uno de los primeros puntos que resolver es el tipo de fijación que te conviene.
Puedes abrirlos total o parcialmente, según te convenga, y crear espacios privados conforme los necesites. Además, puedes elegir entre distintos tamaños.
Las estructuras suelen ser de metal tratado para ofrecer un buen comportamiento a la intemperie. Por su parte, las lonas son de poliéster, generalmente, con algún tipo de recubrimiento.
Toldos verticales
Son ideales en balcones, porches o patios y los vas a encontrar en distintas anchuras y longitudes.
Pueden constituir una barrera contra las inclemencias del tiempo, siempre que no sean excesivamente fuertes.
Son fáciles de instalar y, generalmente, incorporan una manivela para accionarlos.
Según los modelos, incluyen un soporte para fijarlos también por la parte inferior en caso de viento.
Toldo lateral doble
Consta de un marco de metal muy resistente, en general, acero tratado o con recubrimiento de polvo para evitar la corrosión.
Los toldos suelen estar tratados para que sean impermeables y con protección a las radiaciones solares. Por lo tanto, no se decoloran.
Es habitual que dispongan de asas para que sea más sencillo extenderlos hasta donde quieras.
Te ofrecen la ventaja de que cada una de sus partes es independiente de la otra. De este modo, puedes abrir una y no la otra.
El modelo que mejor se adapta a tus necesidades
Ahora que sabes las opciones que puedes encontrar en nuestra tienda, es el momento de que elijas los criterios de compra acordes con tus circunstancias. Te mostramos tres ejemplos, aunque puedes elegir otros distintos.
Toldos laterales y verticales con mejor calidad-precio
Outsunny Toldo lateral retráctil 350×180 cm gris oscuro
Cuenta con un tejido de poliéster con un factor de protección 50 y que es impermeable. Es ideal para proteger del sol, la lluvia y el viento ligero.
Posee un sistema de bloqueo por clip y un muelle para que puedas deslizarlo con facilidad.
Los postes de sujeción se fijan al suelo o a la pared, según tu conveniencia.
La estructura es muy resistente, ya que es de acero con acabado en polvo. Por lo tanto, ofrece una buena resistencia a la corrosión.
Toldos laterales y verticales más vendidos
Outsunny Toldo vertical enrollable 140×250 cm con manivela color crema
Este toldo con protección a los rayos UVA es apto tanto para interiores como para exteriores.
Viene con dos soportes de fijación, uno superior y otro inferior, para sujetarlo si hace un poco de viento.
Incluye los herrajes para su instalación y son fáciles de colocar.
La estructura es de aluminio. Este material no se oxida a la intemperie y es muy ligero.
Toldos laterales y verticales más económicos
Outsunny Toldo lateral retráctil 300×160 cm en gris
Este toldo lateral extensible es muy adecuado para protegerte del sol, del viento suave y proporcionar privacidad a un espacio.
Cuando está plegado, apenas se percibe su existencia, ya que solo verás los postes de sujeción.
Gracias a su mecanismo, el toldo se desliza con suavidad. Además, posee un asa que te facilita el trabajo.
La estructura de metal lleva un recubrimiento en polvo para evitar la corrosión. Por lo tanto, es muy duradero.
¿Por qué comprar toldos laterales y verticales?
Comprar toldos laterales o verticales te proporciona grandes beneficios. Te hablamos de algunos de ellos:
Es una forma eficiente y barata de protegerte a ti y a tu familia del calor y del sol. Por esta razón, es una buena idea contar con él durante los meses cálidos.
Contribuye a dar privacidad a espacios que no la tienen. Además, un toldo lateral es muy útil para separar ambientes en el jardín.
Son tan fáciles de instalar que tú mismo puedes hacerlo y, por otra parte, requieren muy poco mantenimiento.
Puede ser una pieza clave para mejorar el entorno del que dispones, especialmente, si no deseas que se vea algún elemento.
Un espacio sombreado y privado favorece que disfrutes más tu estancia al aire libre.
Son muy duraderos y resistentes porque suelen estar fabricados con materiales de alta calidad.
FAQ
Depende de varios factores, como el tamaño, el gramaje o la posición del sol. Sin embargo, también hay tejidos tratados con filtros ultravioleta. Algunos equivalen a un factor 50.
Sí, algunos modelos se pueden instalar tanto en exteriores como en interiores. Son útiles para crear zonas de sombra en patios cubiertos, porches o terrazas interiores.
Debes fijar las sujeciones como te indique el fabricante. En ocasiones, las debes instalar en la pared o en una columna y, otras, en el suelo. Por esta razón, y dependiendo de cuál es la que te conviene, te aconsejamos que prestes atención a las instrucciones.
Son dos paneles retráctiles que puedes extender o plegar de manera autónoma, con lo cual, ganas en versatilidad y flexibilidad.
Mantenimiento de toldos laterales y verticales
Para que tus toldos verticales o laterales te duren mucho tiempo, es conveniente que les hagas un poco de mantenimiento. Te damos algunos consejos:
De manera periódica, comprueba que las fijaciones siguen bien ajustadas. En caso contrario, apriétalas de nuevo.
Al ser retráctiles, conviene que los mecanismos se mantengan limpios y lubricados.
Si pasan tiempo expuestos al sol, pueden sufrir desgaste, aunque lleven protección solar. Es aconsejable que, cada cierto tiempo, según cada caso, la renueves con un aerosol o algún tratamiento efectivo.
Revisa frecuentemente que no se haya desgarrado la lona, especialmente, cerca de las costuras.
Si se han mojado tus toldos laterales y verticales, asegúrate de que se secan completamente antes de recogerlos.
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